15 de diciembre de 2025
La estructura accionaria de Profertil, una de las empresas líderes en la producción de fertilizantes en Argentina, experimentó una transformación histórica: Adecoagro y la Asociación de Cooperativas Argentinas (ACA) acordaron adquirir el 100% de las acciones, tras la salida de los anteriores socios, YPF y Nutrien.
Profertil opera un complejo industrial de gran escala, orientado a la fabricación de urea y otros fertilizantes nitrogenados que abastecen al mercado interno y sostienen los ciclos productivos del sector agrícola. La recomposición de su accionariado representa un movimiento relevante para la industria de insumos, con implicancias en competitividad, logística y planificación estratégica de la oferta.
Las decisiones de YPF y Nutrien de desprenderse de sus participaciones obedecen a estrategias corporativas de reconfiguración de portafolio y prioridades de inversión globales. La salida de estas compañías abrió la puerta para que agentes del sector local con fuerte inserción en la agroindustria nacional consolidaran la propiedad de la firma.
Adecoagro, un actor principal en producción agrícola, ganadera y de bioenergía, junto con ACA, una organización cooperativa con amplia base de productores asociados, decidieron avanzar con la adquisición para asegurar el abastecimiento de fertilizantes críticos para la campaña agrícola. La iniciativa responde también a una visión de integración vertical de la cadena de valor, reduciendo la dependencia de importaciones y mejorando la sinergia entre producción de granos y disponibilidad de insumos.
La integración vertical es vista como un elemento clave para reducir costos operativos, mejorar la eficiencia en la cadena productiva y garantizar un flujo estable de productos nitrogenados para cultivos extensivos, particularmente soja, maíz y trigo -que constituyen la columna vertebral del complejo exportador agroindustrial argentino.
La consolidación de Profertil bajo control local puede modificar la dinámica del mercado de insumos. Entre los posibles efectos se destacan:
Mayor predictibilidad de abastecimiento para los agricultores asociados a ACA y productores vinculados a Adecoagro.
Posibilidad de ajustar volúmenes y precios en función de la demanda interna y la programación de campañas.
Reducción de la exposición a fluctuaciones de mercados internacionales, gracias a una base productiva más integrada.
Incentivos para inversiones en ampliación de capacidad o modernización tecnológica en Profertil.
Este movimiento también plantea la necesidad de una articulación más estrecha entre la oferta local de fertilizantes y los mecanismos de financiamiento, seguro de insumos y políticas sectoriales que promuevan la adopción de tecnologías de mayor eficiencia nutricional.
Si bien la consolidación de la propiedad da señales positivas de coordinación interna, existen desafíos para el nuevo esquema de control:
Mantener competitividad frente a fertilizantes importados, especialmente cuando los precios globales fluctúan.
Desarrollar estrategias de expansión de capacidad productiva para satisfacer demanda creciente.
Asegurar inversiones en sostenibilidad, reducción de emisiones y adaptación tecnológica.
Fortalecer acuerdos logísticos para optimizar transporte y distribución nacional.
Las proyecciones indican que el sector continuará creciendo, pero la nueva estructura societaria deberá demostrar capacidad de gestión eficiente y planificación estratégica para no solo asegurar insumos, sino también impulsar competitividad regional.
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