La compañía energética Pampa Energía presentó sus resultados del primer trimestre de 2025 con un fuerte mensaje al mercado: la apuesta por Vaca Muerta se profundiza con una inversión de 160 millones de dólares en apenas tres meses, un 40% superior al mismo período del año anterior. La firma anunció, además, que conectará 24 nuevos pozos para alcanzar una producción de 20.000 barriles por día en el corto plazo, con el objetivo de duplicar esa cifra y superar los 45.000 barriles diarios hacia 2027.

El foco principal de estas inversiones se encuentra en el yacimiento Rincón de Aranda, donde Pampa Energía está desarrollando su proyecto más ambicioso desde su fundación. "El desarrollo de Rincón de Aranda cuenta con una inversión estimada de US$800 millones para 2025 y una cifra similar en 2026, la mayor en un solo proyecto en la historia de la compañía", afirmó Gustavo Mariani, CEO de Pampa Energía, durante la presentación ante inversores.

Actualmente, la compañía ya conectó cuatro pozos que aportan 6.000 barriles por día, y se encuentra en plena ejecución de la primera etapa del plan maestro, que incluye la construcción de una planta de tratamiento de crudo, un oleoducto y un gasoducto de evacuación. Estas infraestructuras serán clave para escalar la producción sin cuellos logísticos, en línea con el objetivo estratégico de posicionarse como uno de los principales jugadores del segmento no convencional argentino.

Además de su actividad petrolera, Pampa Energía continúa consolidando su presencia en el segmento gasífero. La compañía inició recientemente exportaciones de gas natural a la región del Biobío, en Chile, desde el yacimiento Sierra Chata -también ubicado en la formación Vaca Muerta-, el cual produce 5 millones de metros cúbicos diarios. El gas exportado atraviesa el Gasoducto del Pacífico, que conecta Neuquén con el país vecino, y se suma al millón de metros cúbicos que ya se envía regularmente a Santiago de Chile a través del Gas Andes.

Horacio Turri, director ejecutivo de Exploración y Producción de Hidrocarburos de Pampa Energía, subrayó: "Poder abastecer de manera sostenida al mercado chileno no solo nos permite generar divisas y abrir nuevas oportunidades comerciales, sino también reafirmar nuestro compromiso con el desarrollo del país y con el potencial de Vaca Muerta".

Durante el último año, la compañía trabajó estrechamente con las transportistas TGN y GPA para adecuar la infraestructura de evacuación, lo que implicó nuevas inversiones en compresión y tramos de conexión clave. Gracias a estos desarrollos, Sierra Chata se consolida como un nodo estratégico para las exportaciones de gas hacia el Cono Sur.

El avance de Pampa Energía refleja no solo una expansión empresarial, sino también una señal alentadora para el ecosistema productivo de Vaca Muerta, que sigue atrayendo inversiones privadas incluso en un contexto económico desafiante. Con un plan de desarrollo intensivo, visión a largo plazo y capacidad de ejecución técnica, la compañía se posiciona como un actor clave en la consolidación energética de Argentina.